Kanon trata sobre la vuelta del protagonista a la ciudad donde pasó el verano por última vez hace 7 años, cuando todavía era un niño. Al volver, Yuichi empieza a encontrarse con chicas de las que en el mejor de los casos lo único que recuerda es que se encontraron cuando eran pequeños. La serie va desarrollando la historia entre cada una de estas chicas y Yuichi.
En la ciudad donde transcurren la serie el invierno es bastante largo y una buena parte de los episodios se desarrollan con nieve alrededor. Entre la nieve, el hecho de que se trata de una ciudad tranquila y solitaria, el mezclar contínuamente recuerdos y sueños, la forma de ser peculiar de cada personaje la serie es una maravilla. En uno de los libros de la serie “Cómo dibujar Manga” hay un comentario de un mangaka llamado Morio Harada que dice: “El alma del manga está en los sueños”. Si trasladamos la frase al anime entonces Kanon es un claro ejemplar de lo que es el espíritu del anime.
En cualquier caso Kanon me ha encantado. No tiene acción, sí tiene algo de fanservice, tiene un fino humor a lo largo de todos los episodios. En definitiva es una serie bonita. Para los que hayan visto Air esta serie es más Air pero contado de otra forma.
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